Bienaventurados son los olvidadizos porque aún así superan sus errores...
Hace poco conocí a Murciano que se refirío a mi de la siguiente forma:
En blogger soy agobiante, en twitter jovial, en FB poético, en aMSN ameno, en persona callado y en foto exaltado...
Pero algo que surgió a la platica fué que en persona soy callado de una forma reservada y es cierto, no soy muy sociable, soy despreocupado pero no muy abierto, y la pregunta final fué: ¿Para qué o quién te reservas?... la respuesta fué:...
Y es cierto ¿para qué o quién nos reservamos? porque después de cada relación, de cada derrota, de cada fracaso, de cada despedida, cada silencio y cada ausencia, nos reservamos, un poco, un mucho, un nada, pero son reservamos como si nadie más nos mereciera y aunque una lagrima quiera salir de esa coraza que in o muy voluntariamente nos confeccionamos, siempre o sabemos, o tratamos de disuadirnos sobre que siempre vendrá algo mejor pero ¿y si no?...
D me regaló algo para el amor, pero de igual forma sirve para encontrar cosas perdidas, tan perdidas como la pasión, la inocencia o la esperanza, la pasión por lo que hago, la inocencia que hace que me sorprenda y la esperanza en el amor...
Conocer a alguien... ya no sé si creo en el amor, lo veo tan lejos, tan ajeno, tan diferente; pero eso no quiere decir que no disfruto, no soy feliz, simplemente es que mis creencias cambiaron y puede ser que algunas cosas las recupere o que lleguen otras y aunque no lo quiera aceptar y mucho menos mencionar ¿empezaré a hacerme preguntas nuevamente?...
Hace poco conocí a Murciano que se refirío a mi de la siguiente forma:
En blogger soy agobiante, en twitter jovial, en FB poético, en aMSN ameno, en persona callado y en foto exaltado...
Pero algo que surgió a la platica fué que en persona soy callado de una forma reservada y es cierto, no soy muy sociable, soy despreocupado pero no muy abierto, y la pregunta final fué: ¿Para qué o quién te reservas?... la respuesta fué:...
Y es cierto ¿para qué o quién nos reservamos? porque después de cada relación, de cada derrota, de cada fracaso, de cada despedida, cada silencio y cada ausencia, nos reservamos, un poco, un mucho, un nada, pero son reservamos como si nadie más nos mereciera y aunque una lagrima quiera salir de esa coraza que in o muy voluntariamente nos confeccionamos, siempre o sabemos, o tratamos de disuadirnos sobre que siempre vendrá algo mejor pero ¿y si no?...
D me regaló algo para el amor, pero de igual forma sirve para encontrar cosas perdidas, tan perdidas como la pasión, la inocencia o la esperanza, la pasión por lo que hago, la inocencia que hace que me sorprenda y la esperanza en el amor...
Conocer a alguien... ya no sé si creo en el amor, lo veo tan lejos, tan ajeno, tan diferente; pero eso no quiere decir que no disfruto, no soy feliz, simplemente es que mis creencias cambiaron y puede ser que algunas cosas las recupere o que lleguen otras y aunque no lo quiera aceptar y mucho menos mencionar ¿empezaré a hacerme preguntas nuevamente?...
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