Tan grande es el olvido y tan corta mi memoria...
En las últimas semanas he tratado de escribir, no lo he logrado evidentemente, todo con la firme consignia de que solo haré cuando mis pensamientos sean consistentes y deje lo efímero de lado por lo menos 5 minutos... (ya va uno y me está costando un trabajo).
Mi desidia por ser localizable se quebrantó, tengo nuevamente celular y recargado, ya que es un smartphone y siempre he creído que un aparato que sea más inteligente que yo, por lo menos en el nombre me llevará a la ruina, pero me ha acercado más e nuevos amigos y tal vez alejado más del mundo real. Mis amigos lejanos han estado más cerca, los cercanos siguen estando donde mismo pero con la diferencia de aque ahora no los frecuento tanto como antes... ¿o ellos me han frecuentado? No lo sé, no quiero hacerme puñetas mentales.
Paralelo a esto, mi periodo de trabajo se termina, estoy a menos de un mes de renunciar y todo indica que el trabajo se incrementa y por eso no me quieren dejar ir; pero paralelo a esto: mis visitas a la ciudad monstruo se han incrementado, posibilidades de tener una casa allá son factibles y positivas pero sigo sin apresurarme a tomar una desición. Pero con la duda de realmente ¿quién soy? el a dónde voy lo tengo resuelto, pero la pregunta clave es ¿quién soy? y de esta se deriva la típica futurista ¿dónde puedo estar parado? con sus respectivas ¿¿me irá bien?
De todas las anteriores el 99.9% de las predicciones es que me irá muy bien (esto dicho por todas las personas cercanas) yo siempre creo que los pronosticos son para ser desmentidos, y tal vez lo que no me atrevo a decir es simplemente que no me va a ir como todos creen que me va a ir, no haré lo que todos esperan que haga, no les daré gusto para satisfacer sus deseos no cumplidos; creo que me irá mejor de lo que espero y eso es algo que siempre me sorprende de mi porque en estos días descubrí que tengo la capacidad de improvisar y finalmente saber que si algo anda mal, lo puedo subsanar, afrontar y reiniciar.
Este blog comenzó como una necesidad de ordenar mis pensamientos y finalmente Darwin tenía razón, tendemos a evolucionar, incluso en las palabras, porque lo que ahora hace o emerge por la necesidad de reconocer sentimientos ¿incluso aunque sean muy "border"?...
En las últimas semanas he tratado de escribir, no lo he logrado evidentemente, todo con la firme consignia de que solo haré cuando mis pensamientos sean consistentes y deje lo efímero de lado por lo menos 5 minutos... (ya va uno y me está costando un trabajo).
Mi desidia por ser localizable se quebrantó, tengo nuevamente celular y recargado, ya que es un smartphone y siempre he creído que un aparato que sea más inteligente que yo, por lo menos en el nombre me llevará a la ruina, pero me ha acercado más e nuevos amigos y tal vez alejado más del mundo real. Mis amigos lejanos han estado más cerca, los cercanos siguen estando donde mismo pero con la diferencia de aque ahora no los frecuento tanto como antes... ¿o ellos me han frecuentado? No lo sé, no quiero hacerme puñetas mentales.
Paralelo a esto, mi periodo de trabajo se termina, estoy a menos de un mes de renunciar y todo indica que el trabajo se incrementa y por eso no me quieren dejar ir; pero paralelo a esto: mis visitas a la ciudad monstruo se han incrementado, posibilidades de tener una casa allá son factibles y positivas pero sigo sin apresurarme a tomar una desición. Pero con la duda de realmente ¿quién soy? el a dónde voy lo tengo resuelto, pero la pregunta clave es ¿quién soy? y de esta se deriva la típica futurista ¿dónde puedo estar parado? con sus respectivas ¿¿me irá bien?
De todas las anteriores el 99.9% de las predicciones es que me irá muy bien (esto dicho por todas las personas cercanas) yo siempre creo que los pronosticos son para ser desmentidos, y tal vez lo que no me atrevo a decir es simplemente que no me va a ir como todos creen que me va a ir, no haré lo que todos esperan que haga, no les daré gusto para satisfacer sus deseos no cumplidos; creo que me irá mejor de lo que espero y eso es algo que siempre me sorprende de mi porque en estos días descubrí que tengo la capacidad de improvisar y finalmente saber que si algo anda mal, lo puedo subsanar, afrontar y reiniciar.
Este blog comenzó como una necesidad de ordenar mis pensamientos y finalmente Darwin tenía razón, tendemos a evolucionar, incluso en las palabras, porque lo que ahora hace o emerge por la necesidad de reconocer sentimientos ¿incluso aunque sean muy "border"?...
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