Today has been ok


¿Has visto que egoístas nos volvemos cuando estamos solos? Y que segregados también. Hace una semana comenzó a llover en GDL y con ella cambios llegaron no solo a la ciudad, sino también a mí y por ende al blog. Decidí cambiar el nombre de mi blog, simplemente por moral, por autenticidad y por gusto. Si en un principio era una copia, hoy trato de ser autentico y como dijo L’Agrado: “Una es más autentica, cuando más se parece a lo que soñó de sí misma”. Y eso pretendo ser yo buscando las piezas, leyendo, olfateando, saboreando y palpando y porque no, también enamorándome de esos pequeños placeres que voy encontrando.

Si algo estoy a-prendiendo es a conocerme más, a comenzar por lo básico y simplemente reír de las grandes miniaturas de la vida pero no por eso perderles el respeto. Al leer tantas cosas en infra y supra blog, he descubierto que no puedo creer al 100% en algo y 100% en nada, que la cuestión es simplemente creer en mí y en estos días de dudas médicas y estatales, despierto ante una realidad que nunca antes en GDL había percibido.

Declaraciones falsas, aprobaciones superfluas y orgullos nada laicos, es por eso que en estos días GDL ó la ciudad del pecado se transformo en la ciudad sin ley, una ciudad sin ley que terminó en pelea, con tardanzas incidentales y malestares entre 2 de sus ciudadanos, pero si algo tenemos que aprender en estas situaciones es que no todo es perfección y felicidad y saber lidiar como adultos las situaciones, aprender a ir a trasfondo, a no dejar de consumir en breve y en serie como lo dije
aquí y esforzarnos porque aunque no lo digamos en voz alta, creemos en el amor. Este plasmado en demostraciones cursis o sea real y vivencial, lleno de aprendizaje cotidiano y caluroso, donde no existe el photo shop a las relaciones y el diseño de la vida no es algo que tengamos claro, y acudiendo a alegorías propias de mi formación académica… simplemente esperamos que resulte algo pero el fruto puede variar según nuestro cuidado y dedicación.

Y tal vez, solo tal vez algunas cosas se hayan roto, las decepciones hayan llegado y las condiciones se transmuten pero en esta ciudad sin ley ¿Acaso no es mejor romper algunos esquemas y enamorarnos de los defectos que de las virtudes?

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