La semana pasada comenzó con un viaje, más que necesario, a León, el manejar por carretera demás de relajarme, me saca del estrés de esta ahora ciudad solo GDL, debo decir que León es espantoso, si vualidades buenas, pero es un pueblo en grandote, lo siento, es vdd. Al evento al que fuí, estuvo del asco (relacionado con el cambio climático), lo único bueno que saque del viaje además de unas botitas muy casuales y muy baratas, en vdd GDL es la gloria, por el momento o hasta que el efecto tranquilizador de los límites estatales perezcan.
Y esto tiene que ver con todos aquellos que hemos salido de esta valle del silicón y fantasía, para residir en otro asentamiento, será que en los letreros de: "esta dejando GDL" ¿existe cierta fragancia que hace que extrañemos la ciudad?
Pues si es así, cumplió su encomienda, al regresar y encontrarme con Mexican Rainbow, y darme cuenta que ser tapatío no es una etiqueta es una aptitud más que actitud, y tender a subir, más que subir a tender.
Pero en fin, al llegar el fin del fin de semana y el inicio de un nuevo comienzo, breve pero comienzo, es así que aunque un poco de sueño, pinta para que todo se artícule mejor y el atisbamiento del tedio, se contemple desde otro lado. Y es cuando me pregunto ¿es forzoso salir para darte cuenta de cuanto extrañas algo?