made in Tepito

Me quiero volver chango... fué lo primero que pensé cuando me dijeron que la cd. no era normalmente así, un domingo 14 de febrero relajado y donde normalmente había tráfico, hoy estaba muerta, tan muerta como GDL los domingos. Me quiero volver chango; pero las cosas cambairon, después de conocer a una pareja tan abierta y conocer la colonia Roma, me reencontre con un amigo que migro a la ciudad de las oportunidades, y donde al parecer le va mejor laboralmente, sin dejar a un lado la diversión.

Santa Fé, Polanco, Antára Polanco (donde lo único que me falto fue entrar a Burberry, ladita sea!!), Tepito y es aquí dónde hacer una pausa lo requiere... No es como lo pintan, no es lo peorsito, es como el baratillo de GDL, es muy barato y realmente puedes encontrar hasta el alfiler de tu sombrero de la primaria cuando bailaste singing in the rain y me gusto, poder caminar sin miedo, me gusto probarme algo, me gusto que mis standares han cambiado, me di cuenta que al poder estar en un lugar como Tepito, podía ser yo, sin miedos y me di cuenta, ahí parado, rodeado de personas que le temía al compromiso.

Entre miles de puestos de garnachas, cd's y dvd's de $5.00, alitas, establecimientos con micheladas, artilugios viejos y personas y personajes diversos, lo descubrí, le tuve miedo al compromiso, aquello que no se dió finalmente fue por un miedo proyectado ¿a dónde iba? ¿podía cumplir las expectativas de Riñón? ¿podía hacernos feliz? Tantas preguntas y tan solo una respuesta: ya no estamos juntos, ya no sirve de nada, pero saber que al compromiso le tuve miedo, fue un gran avance.

Después de salir y andar por un paseo de la reforma done resulta que ahora ya de reformista no tenemos nada. Terminé e la Condesa, insisto en decir que fue un viaje sin expectativas y creo que por eso salió mucho mejor.



Después de un viaje nuevamente a la Narvarte, el día terminó con una pachequez en el segundo piso del periférico, empezando a entender done estoy y por eso no me refiero al plano geográfico, sino en mi vida y lo que me falta por descubrir...