And the sun goes down



Hoy me dí cuenta de dos cosas: 1.Soy Afortunado por el recorrido que hago a mi trabajo, ya que pasó por lugares históricos (el degollado, catedral, los arcos de vallarta y la minerva et. al), utilizo el transporte colectivo eficiente (macrobus, tren ligero) y voy a un lugar partado a trabajar y aunque si está lejos, me gusta (el bosque de la primavera). 2.Pero también hoy me di cuenta que al realizar este transcurso y escuchar mi iPod, la mayoría de las veces escucho la misma canción (esto indíca que debo o quitar esa canción o comprarme otro iPod de más capacidad).

Todo esto en mi ociosidad, hizo que pensara si en algún momento llegaré a hartarme del mismo recorrido, llevo 2 años realizando el mismo recorrido de casa a trabajo, y no me he hartado y aunque estoy en trámites de cambio de vivienda, algo tiene esa canción que por más que la repita 300 veces, me sugue gustando.

Tal vez no es el mismo sentimiento inicial, pero algo tiene a que no la quite del iPod; y si esto me pregunte con un simple recorrido y una simpel canción, la duda se hizo más grande y me pregunté ¿Alguna vez me hartaré de GDL?

Llevo casi tres años nuevamente en esta ciudad del lucro, pero hasta ahora me gusta y mi intuición no me engaña, GDL está aquí para darme más y que sea recíproco...

2 comentarios:

Alicia's Own dijo...

A mí también me pasaba cuando iba a trabajar que jamás me aburría en el trayecto y eso que no tengo iPod!

No sé, será el constante sentir que vamos hacia alguna parte, la gente que casi siempre es distinta, pero es bueno que no nos aburramos de las cosas cotidianas.

Ric dijo...

Alicia gracias por comentar, puedo deducir que a veces dejamos pasar todo aquelloque otras personas admiran pero que finalmente nos llean expectativas cotidianas, GDL no es una ciudad como BA o LNDS donde creo que hay más atractivos pero lo importante es quen o nos aburrimos en ningún trayecto. Un saludo.