Si bien cada individuo debe insertarse en una comunidad para poder desarrollarse, existen algunos que migran constantemente en la huida de la pertenencia, y si bien en una emporio relapso como suele serlo GDL, nos ofrece infinidad de saberes multitransversales, en ocasiones surge la necesidad de migrar atemporalmente para redescubrirte en tus querencias, donde en la moches tapatía, exclusiva de estas delimitaciones metropolitanas, pide un descanso y solo hay 2 lares donde reflexionar y divertirse: PV o CHAPALA.
Eusebio Ruvalcaba dijo algún día, hace poco, que los párrafos se hilvanan para dar paso a ideas hilvanadas y esto me hizo pensar que a final de cuentas esta conjetura y convergencia de ideas es debido a que nuestra vida es simplemente un zurcido en ocasiones invisible de los hechos y párrafos hilvanados que subsecuentamos.
En su platica (Eusebio) describió como aconteció que fue converso de la historia hacia la literatura, lo cual me hizo pensar en ¿si soy bueno escribiendo? Hasta hoy creo que he recibido comentarios de extraños y cercanos de ambas partes con claridad y confusión de mis escritos. Yo no lo sé de cierto pero lo supongo, y aunque en frase trillada no sé si soy bueno escribiendo, no sé ciertamente si mis pensamientos plasmados en letras son buenos, y menos lo supongo pero si sé que me encanta.
Yo mismo siento la pasión y una lumbrera en mis dedos cuando transcribo la ilación de mis ideas con la hilvanación de los eventos cotidianos extra-ordinarios de mi vida ordinaria.
Puedo acertar en incertidumbres i-lógicas de los eventos, pero me reconozco escaso para hablar en una voz activa, pero al instante de hablar pasivamente y literariamente, puedo transversar los versos bien definidos y darles otro contexto o simplemente puedo escribir.
Pero si al final del día las actividades concomitantes simplemente nos muestran nuestras fallas y eso repercute en las relaciones humanas ¿Entonces debemos apanicarnos o simplemente ser valientes y aceptar la realidad de nuestros actos?
Eusebio Ruvalcaba dijo algún día, hace poco, que los párrafos se hilvanan para dar paso a ideas hilvanadas y esto me hizo pensar que a final de cuentas esta conjetura y convergencia de ideas es debido a que nuestra vida es simplemente un zurcido en ocasiones invisible de los hechos y párrafos hilvanados que subsecuentamos.
En su platica (Eusebio) describió como aconteció que fue converso de la historia hacia la literatura, lo cual me hizo pensar en ¿si soy bueno escribiendo? Hasta hoy creo que he recibido comentarios de extraños y cercanos de ambas partes con claridad y confusión de mis escritos. Yo no lo sé de cierto pero lo supongo, y aunque en frase trillada no sé si soy bueno escribiendo, no sé ciertamente si mis pensamientos plasmados en letras son buenos, y menos lo supongo pero si sé que me encanta.
Yo mismo siento la pasión y una lumbrera en mis dedos cuando transcribo la ilación de mis ideas con la hilvanación de los eventos cotidianos extra-ordinarios de mi vida ordinaria.
Puedo acertar en incertidumbres i-lógicas de los eventos, pero me reconozco escaso para hablar en una voz activa, pero al instante de hablar pasivamente y literariamente, puedo transversar los versos bien definidos y darles otro contexto o simplemente puedo escribir.
Pero si al final del día las actividades concomitantes simplemente nos muestran nuestras fallas y eso repercute en las relaciones humanas ¿Entonces debemos apanicarnos o simplemente ser valientes y aceptar la realidad de nuestros actos?
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