La puntita

¿Qué tan bueno eres en la cama como para dejar huella?...

Platicando el otro día con alguien (no me recuerdo con quien sostuve dicha platica) llegamos a la conclusión de que inevitablemente siempre hacemos comparaciones, sobre nuestras parejas anteriores, la actual y como esperamos que sean nuestras parejas sexuales venideras.

Recuerdo que mi primera pareja era nada de lo que me esperaba pero todo lo que yo requería en ese momento y entonces fue el #1. Después llegaron más y la lista dejó las unidades para entrara en el campo de las decénas, entre más parejas sexuales tenía (incluídos parejas estables) más decepcionante se hacía el panorama... pero entonces de seguir estereotipos empecé a ver algo más allá y a crear una filosofia que aún ahora funciona:

"Nunca hay que discriminar cuando a sexo se refiere"...

El mejor sexo que he tenido a sido con feos ¿por qué? Porque creo que al ser menos agraciados le invierten mayor esfuerzo en lo que viene siendo "las artes amatorias", es por eso que seguí acumulando experiencia (léase teniendo sexo casual) hasta que el listado llegó a cierta cifra que alarmante llamó mi atención y entonces dejé de contar, dejé de aferrarme a los detalles completos (edad, nombre completo, ocupación, número telefónico, etc.) y decidí quedarme con lo mejor que me dieron (la experiencia).

Es por eso que al mirar en retrospectivo suelo ver lo que era yo y lo que soy en este momento porque en ocasiones más allá del amor, está el trance, ese que nos hace sequir con algo que puede transformarnos y saber lo que realmente estamos dispuestos a dar y lo que definitivamente ni de broma haríamos pro primera vez o nuevamente.

Por eso muchas ocasiones lo que empieza como sexo debería de quedarse como tal ¿pero cuanta es nuestra necesidad de trascender y ser mejores para no quedarnos en el olvido?

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